Agosto es el mes más caluroso del año y hasta el chocolate sufre las consecuencias de las altas temperaturas que estamos alcanzando últimamente. Mientras nosotros aprovechamos este buen tiempo para huir de nuestra rutina diaria y visitar sitios frescos, tendemos a pensar que muchos alimentos deberían meterse en la nevera para asegurar su buena conservación.
Sin embargo, en el caso del chocolate lo ideal es todo lo contrario, es decir, no meterlo en el frigorífico. De esta manera evitamos que pierda su sabor y aparezca ese color blanquecino tan característico que surge al haber estado refrigerado.
La forma de preservar el chocolate siempre dependerá del tipo del que se trate. Es cierto que al producir el chocolate en cultivos más sostenibles también ayuda a que su duración sea mucho mayor. Por ello, empresas como Paccari se centran en una producción natural y orgánica para llevar el chocolate a sus consumidores bajo su filosofía “del árbol a la barra”, siendo la única empresa en el mundo que trabaja con cacao biodinámico.
A continuación, te damos 5 consejos de cómo conservar chocolate en verano y no perecer en el intento. Vale la pena aclarar que estos tips son para el chocolate negro, ya que el chocolate blanco o chocolate con leche, por tener azúcar y productos de lactosa, tienen otros métodos de conservación.
¿Dónde guardarlo?
En este caso la despensa siempre será la mejor opción ya que no recibe el sol directamente y los alimentos se conservan bien durante todo el año. Los expertos afirman que el chocolate debe mantenerse entre los 15 °C y 18 °C y en espacios donde la humedad sea menor de un 60%, lo cual reafirma el error de colocarlo en la nevera cuya temperatura oscila entre los 4 °C y 5 °C.
Al guardarlo en la despensa, puedes optar por conservarlo de distintas formas. La primera de ellas es colocarlo en una bolsa hermética para que no entre demasiado aire. Si la bolsa resulta pequeña entonces corta el chocolate en trozos.
Otra opción que tienes es guardarlo en un frasco de cristal. La idea es que el chocolate no entre en contacto con el aire y así no absorba olores externos. Si se está cerrado por completo y el frasco mantiene la temperatura, el chocolate sabrá a recién salido de producción. Delicioso.
¿Y si mi despensa tiene un poco más de humedad que la recomendada? No te preocupes, no es tan complicado, recurre al plan B, también usado para conservar frutas y verduras: envuélvelo en papel de cocina. Este papel absorberá la humedad y evitará que la manteca del cacao suba a la superficie y se forme la capa blancuzca polvorosa que hemos visto en el chocolate.
Y si no te apetece seguir ninguna de las recomendaciones anteriores, entonces ten en cuenta que lo puedes congelar, aunque no es lo ideal. Puedes coger el chocolate, colocarlo en una bolsa de cierre hermético y meterlo en el congelador. Si optas por este sistema es preferible enfriar el chocolate previamente en la nevera a fin de evitar el cambio drástico de temperatura, así como evitar que la bolsa tenga mucho aire.
Cuanta mayor calidad tenga el chocolate mejor se conservará. Empresas como Paccari siempre tratan de entregar un producto de calidad que no solo deleite a los más exigentes, sino también que complazca a aquellos que ponen el máximo cuidado en seleccionar cada cacao a la perfección. Estos más de 4.000 agricultores de pequeña escala son los encargados de cuidar la biodiversidad y la calidad del cacao, recibiendo por ese compromiso un precio superior que incluso puede llegar a triplicar sus ingresos.
Orgullosos de tener más de 30 sabores distintos, Paccari fue reconocido en los prestigiosos International Chocolate Awards, como uno de los mejores chocolates en barra del mundo, por ello se convierten en la barra ideal para los amantes de este delicioso alimento.
