Pascual ha consolidado su apuesta por el cultivo local con la compra de un 25% más de materias primas de origen España en el último año. La compañía sigue demostrando así su compromiso con la economía rural y los productos de proximidad a través de su marca de bebidas vegetales Vivesoy, la única del mercado con el 100% de sus ingredientes procedentes de cultivos situados en nuestro país.
En este sentido, la marca de Pascual adquirió 3.100 toneladas de soja en 2022, un 44% más que 2021, y una inversión mayor al 1,5 millón de euros; mientras que compró 2.300 toneladas de avena, un 5% más que en 2021, y un valor en el mercado de más 1 millón de euros.
Esta inversión en productos de proximidad también ha supuesto la reducción de la huella carbono de la compañía al evitar la emisión de 577 mil kgCO2e en el transporte de las materias primas; que equivalen a las emisiones de 279 vehículos diésel estándar durante un año o realizar 86 vueltas al mundo.
En palabras del director de Negocio Plant Based de Pascual, Sergio Bravo, «la compañía está comprometida desde hace más de 20 años con el desarrollo sostenible y con el apoyo a los agricultores españoles. Nuestra marca de bebidas vegetales es un claro ejemplo de ello, Vivesoy es la única del mercado con el 100% de sus ingredientes procedentes de cultivos situados en España, certificada por AENOR, para seguir promoviendo prácticas responsables que beneficien a las zonas rurales y al medioambiente».
Además, según el último estudio de American Express[i] sobre comercios locales, los españoles destinaron en 2022 alrededor del 36% de su gasto mensual a comprar productos de proximidad. El apoyo al pequeño comercio y llevar una dieta más saludable son algunas de las razonas por las que, sobre todo los jóvenes, adquieren este tipo de productos. Del mismo modo, los consumidores relacionan al producto de proximidad con mayor valor nutricional y mejor calidad, según el último estudio de la OCU[ii].
El producto de aquí, como eje estratégico
La inversión en cultivos locales ha sido un eje estratégico de Pascual para impulsar el crecimiento sostenible de las zonas rurales de nuestro país. La compañía, a través de su marca Vivesoy, trabaja con 220 agricultores españoles, a través de contratos directos previos a la siembra, alcanzando 2.335 hectáreas repartidas por Castilla-La Mancha, Castilla y León, Navarra, Aragón, Cataluña, Andalucía, Murcia, Comunidad Valenciana y Extremadura.
Tal y como apunta Sergio Bravo, “los agricultores son fundamentales. Tenemos una relación basada en la confianza, la profesionalidad y el largo plazo. Más del 95% de los agricultores que trabajan con nosotros repiten cultivo al año siguiente. Trabajamos muy cerca de ellos asesorándoles y ofreciéndoles un seguimiento técnico continuado que redunda en unos cultivos más eficientes, rentables y de la más alta calidad”.
De esta manera, Pascual demuestra una vez más que es posible alcanzar un crecimiento empresarial sostenible mientras se promueven prácticas responsables que beneficien tanto a las comunidades locales como al medioambiente.